Muriel Fernández Danyluk es una vecina de Lomas que, con apenas 12 años, se encuentra llevando a cabo un sueño: llenar su barrio de mariposas. Si bien en un principio pensaba en ayudar a animales exóticos, luego apuntó a algo más cercano y decidió ayudar a que las mariposas monarca encuentren en su barrio de Banfield las condiciones para poder desarrollarse.
“Fui investigando y descubrí que las mariposas monarca concurrían mucho a Buenos Aires, pero en las últimas décadas había disminuido la cantidad de especímenes rondando. Recordé que mis papás y mis abuelos me hablaban de que antes había jardines llenos de mariposas y esto me apenó bastante”, comentó en diálogo con El Diario Sur Muriel.
Y continuó: “Tamara y Eduardo, del vivero Los Tilos, que ya son como familia, me trajeron asclepias y me dijeron que estas eran el alimento principal de las orugas de la mariposa monarca. Luego vimos a una de estas mariposas depositar sus huevos en la planta, fue uno de los momentos más felices de mi vida”.
Según contó Muriel, a los dos meses la oruga ya había llegado a la etapa de crisálida. “Cuando vi que la mariposa finalmente se liberó fue muy emocionante. Mediante estas acciones estoy segura de que podemos cambiar el mundo, porque es algo que logré transmitir a los vecinos del barrio y a mi familia”, expresó.
En ese sentido, aclaró: “Sin Tamara y Eduardo proporcionando las plantas, esto no habría sido posible, ellos me ayudaron a compartir este proyecto los vecinos”.
Por su parte, Tamara Bratich, del vivero “Los Tilos” de Banfield también dialogó con El Diario Sur y contó detalles sobre el proyecto. “Buscamos es que haya más mariposas porque son polinizadoras, esto quiere decir que más flores tengamos, mejores frutos vamos a comer”, explicó.
“Nosotros lo que pedimos es que tengan jardines de mariposas, que tengan plantas, no solo la asclepias, hay otras especies que albergan más de 10 variedades de mariposas”, aclaró. Y continuó: “Las mariposas tienen una autonomía de 200 metros, después tienen que volver a alimentarse, si conseguimos que antes de esta distancia haya otro jardín de mariposas, entre nosotros van a volar miles”.
Además, comentó que en el vivero cuentan con un mapa en el cual registran dónde quedan los diferentes jardines de mariposas del barrio: “Cada persona pone su mariposita, ya llevamos registrados más de 120 jardines. Ya nadie mata a gusanos porque ya todos saben es una oruga de alguna mariposa, eso es hermoso”.
Quienes quieran conocer más acerca de este proyecto puede hacerlo ingresando al Instagram @lasmariposasdemuriel, donde la pequeña vecina documenta su trabajo y responde dudas a los vecinos, o también a través de la cuenta @viverolostilos.
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