El hombre caminaba junto a su pareja, también policía, por la calle Albarracín, entre Ecuador y Colombia, en Quilmes, hasta que un vecino del barrio se les habría acercado para robarles, por lo que el agente agarró el arma de su esposa para amenazarlo y luego dispararle en la mano. Tras una llamada al 911, personal de la Comisaría N°9 arribó en el lugar de los hechos alertados por detonaciones de armas de fuego, aparente pueblada y tentativa de robo.
Al llegar se encontraron con algunos vecinos, entre los cuales estaba una tercera policía de civil, que explicaron que un ladrón intentó robarle a una pareja y que esta se defendió a los tiros. Según aseguró el medio ANDigital ,el policía que disparó dijo que tomó su arma al ver que su pareja se había quedado paralizada. Entonces fue cuando le disparó al supuesto delincuente. Una de las balas impactó en la mano derecha, generando una herida con orificio de entrada y salida.
Luego de la violenta escena, vecinos del barrio apoyaron al joven herido e insultaron y agredieron al policía que le disparó. También se tornaron hostiles con la patrulla que acababa de llegar, por lo que esta se defendió a los disparos con una escopeta Escort de calibre 12/70 y una pistola Bersa Thunder PRO Mini, aunque no hubo heridos.
Una vez controlada la situación, los involucrados fueron trasladados a la Comisaría N°9 y la causa quedó a cargo de la UFI N°7 del Departamento Judicial de Quilmes, la cual, como primera medida, dispuso que las instrucciones del caso corrieran por cuenta de la Prefectura Naval Argentina.
Además, se ordenó un allanamiento en el domicilio de la tercera policía que estaba en el lugar de los hechos, en el que se llevó a cabo la incautación de su arma reglamentaria, una pistola Bersa TPR de calibre 9 milímetros, que contaba con dos cargadores y 25 municiones intactas del mismo calibre.
Después, se ordenó la aprehensión del sujeto con carpeta psiquiátrica, bajo una causa caratulada como "abuso de armas", y se secuestraron las armas de todos los operarios presentes en el hecho, incluyendo las de la patrulla que llegó para calmar las aguas. Finalmente, la Auditoría General de Asuntos Internos se dispuso la desafectación del servicio del hombre detenido.
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