A los 13 años, Tiziano Galeone la rompe en el básquet del Club Deportivo San Vicente y este domingo dio un salto al coronarse campeón con la Selección de la Asociación Platense de Básquet, a la que fue convocado por su gran rendimiento. En el Campeonato Provincial U13 que se disputó en Bahía Blanca, capital del básquet, se destacó ante los locales (metió 20 puntos), Mar del Plata (27 puntos) y Junín (27 puntos) y fue elegido con el MVP (mejor jugador) del certamen.
Tiziano Galeone, promesa del básquet de San Vicente: campeón provincial y el mejor del torneo
Tiene 13 años y juega en el Club Deportivo San Vicente. Este domingo se consagró campeón provincial con la selección de La Plata y lo eligieron MVP del torneo.
24 de septiembre de 2024 - 19:59
A pesar de su corta edad, Tiziano ya mide 1.80 y genera comentarios por sus destacadas actuaciones en todos los partidos. La definición del Provincial se dio luego de la victoria ante Mar del Plata de la selección platense. Antes le habían ganado 75 a 74 a la poderosa Bahía Blanca. Ese fue el batacazo que le permitió a Tiziano y su equipo gritar campeón.
"Yo siento que me desempeñé bien, me desempeñé bien en ataque y me desempeñé mejor de lo que me esperaba en defensa. También me sentí jugando muy tranquilo, pude mantener la calma, nunca reaccioné a nada, siempre tranquilo apoyando a mis compañeros", señaló Tiziano, en diálogo con El Diario Sur.
"Juego preferentemente de base, de uno, pero si tengo que jugar en otra posición no tengo problema y puedo rendir", comentó el adolescente, que tiene el sueño de jugar profesionalmente y llegar lo más lejos posible en el básquet.
La trayectoria de Tiziano Galeone
En diálogo con El Diario Sur, la madre de Tiziano, Silvina Manuel, contó: "Él comenzó cuando tenía apenas 3 años en el Club Deportivo San Vicente, y desde ese momento que no dejó de picar una pelota nunca más. Fue escalando categorías, hasta que llegó a la U12 y lo citaron para formar parte de la Asociación Platense de Básquetbol (APdeB), es decir, la Selección de La Plata. Recién a los 13 años pudo meterse a los entrenamientos".
Y continuó: "Eran 500 chicos para meterse y fueron quedando los mejores, fueron recortando hasta que terminaron siendo 12, quienes disputaron el campeonato zonal en Chivilcoy y salieron campeones. Siguieron trabajando con la Selección con el objetivo de ganar en Bahía Blanca".
Después de mucho esfuerzo y entrenamientos, llegó el viaje a Bahía Blanca, donde hicieron historia: "Le ganaron al local por un punto, jugaron excelente, una locura lo que hicieron. Hasta ese momento el objetivo estaba cumplido. Al otro día sufrieron las consecuencias, ya que Bahía los sacó de la cancha y los llevaron a una alternativa que no correspondía, pero jugaron igual. Ahí jugaron muy mal, perdieron por seis puntos".
Y agregó: "Después de esa derrota, les tocaba jugar contra Mar del Plata. Cualquiera podía ser campeón en ese punto. La Plata le ganó a Mar del Plata y había que esperar que Bahía le ganara a Junín, lo cual pasó, por lo que salieron campeones. Tiziano resultó ser el goleador por segunda vez en su carrera, el MVP y, como es el capitán, recibió la copa y se la llevó a su equipo. Un momento inolvidable".
Los objetivos de la promesa sanvicentina
La carrera de Tiziano recién comienza, pero eso no le impide soñar en grande. "Los objetivos tienen que ser a corto plazo y están planteados con su club en San Vicente. Sin embargo, él sueña con la carrera de Manu Ginobili y llegar a la NBA o a alguna liga europea".
Y expuso: "Él lo tiene guardado en su corazoncito y yo creo que esa es su llamita interior, la cual hace que él sea lo que es dentro de la cancha y que haga lo que hace, pero bueno, también tiene que crecer. Por más de que mide 1,80 metros y calce 45, es un nene todavía".
La emoción de una madre
"Como madre se me explota el pecho del orgullo porque el trabajo fue mucho, muy sacrificado. Tiene doble jornada en el colegio y muchas veces se tuvo que ir para poder llegar a los entrenamientos en La Plata, Ensenada, Berisso, etcétera, y para nosotros, que estamos un poco alejados, se nos hacía muy difícil hacer todo esto, pero estamos orgullosos, él ama el básquet, él respira el básquet, vive con una pelota por debajo del brazo", expresó Silvina.
Y añadió: "No es un deporte que él practica, sino que es su forma de vida. Se encontró con 11 guerreros que piensan igual que él y que estaban muy bien preparados para el partido en Bahía Blanca. Realmente hicieron historia porque llevaban como 74 años sin ganarle a Bahía Blanca, y mucho menos de local. No cabe el orgullo dentro de mi cuerpo, es felicidad plena".
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