Daiana Yáñez (42) soñó toda la vida con bailar en el Carnaval de Río de Janeiro, una de las celebraciones más grandes del mundo. Desde adolescente que baila samba, disciplina de la que también es profesora en dos escuelas de San Vicente y que ahora pudo mostrar en el mismísimo sambódromo carioca.
Una profesora de danza de San Vicente cumplió el sueño de bailar en el Carnaval de Río
Daiana Yañez tiene 42 años, hace más de 25 que baila samba y tiene una escuela en San Vicente. Entró bailando al sambódromo de Río.
“Esto es un sueño que yo tengo desde muy chica, desde los catorce años. Toda la vida soñé con esto y trabajé para que se hiciera realidad y se me dio a esta edad en la que yo no creía que se me pudiera dar”, comentó Daiana, en diálogo con El Diario Sur.
La bailarina, que junto a su marido fundó hace cinco años la escuela “Dojo Dance”, le escribió una carta a gran parte de las escolas de samba de Brasil, que participan en el Carnaval de Río, a través de Instagram. “Les conté mi historia, mi sueño, lo mucho que amaba la cultura de ellos y su música, y me contestaron de Unidos de Bangú”, recordó la vecina.
“Me pidieron que les enviara un video sambando, se los mandé y en una semana más o menos me respondió que sí, y ahí se puso en marcha esta locura que fue mágica, hermosa”, manifestó Daiana, que también da clases en la escuela “Arcoíris danza”.
La bailarina fue a Brasil con una amiga y estudiante de su escuela, Mirta Ramos, y ambas participaron de la presentación en el sambódromo el 1° de marzo pasado. “Fue una experiencia inolvidable porque después del primero de marzo que bailamos en el carnaval que comúnmente ve todo el mundo por la tele, también me invitaron a desfilar en otras escuelas que son más de barrio, que hacen todo con la misma garra que se ve el Carnaval de Río”, comentó la mujer.
Antes de la presentación en el escenario, Daiana y su amiga pasaron por un proceso de ensayo de alrededor de una semana, en la que también se probaron distintos vestuarios para la ocasión. “Para mí cada detalle era estar cumpliendo un sueño, todo me sobrepasaba, todo me emocionaba, todo me hacía llorar. Y el día del evento fue increíble, tenés las tribunas con la gente desesperada esperando que salga su escuela y sentís una vibra que es única”, rememoró la bailarina.
La experiencia fue tan increíble para Daiana, que piensa en volver al sambódromo, pero de otra manera. “Yo doy clases acá en San Vicente y ahora mi sueño es hacer llegar a otros que sueñen lo mismo que yo, algunos de mis alumnos puedan ir. Ese sería mi mayor sueño, así que este año voy a trabajar por eso”, expresó la vecina.
“Esta pasión me salvó la vida”
La carta que Daiana mandó a las distintas escolas de samba contaba su dura historia de vida. “A los 14 años empecé a vivir en un hogar por diferentes cuestiones de la vida, hasta los 21 años”, relató la bailarina. Y agregó: “Ahí a los 15 años conocí la música brasileña a través de una amiga que me llevó a un boliche. Empecé a conocer bien la cultura de ellos y eso a mí me enamoró”.
“Tenía una adolescencia enfocada y ocupada en aprender a bailar, que hacía que yo no me sintiera sola. Cuando me sentía triste bailaba y siempre que conocía a alguien le enseñaba a bailar”, destacó la vecina. “Yo siento que en algún punto esta pasión a mí me salvó la vida en la adolescencia. Entonces lo que quiero con mi historia y con lo que logré es inspirar o ayudar a quien hoy esté en un hogar y decirle que se puede salir”, finalizó Daiana.
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